Que el Sr les bendiga. Este es el Pastor Garduno y estamos en el Día 19 de nuestro Ayuno de Daniel. Quiero animarlos a mantenerse fieles buscando el rostro del Sr durante este tiempo de ayuno; examinando nuestros corazones a la luz del corazón de nuestro Dios.

HOY meditaremos en:

La Lucha del Cristiano

“Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre. ¹² PELEA LA BUENA BATALLA DE LA FE, echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo fuiste llamado, habiendo hecho la buena profesión delante de muchos testigos.” (1ª Timoteo 6:11-12).

¡El verdadero cristianismo es una lucha! Notemos bien la palabra “VERDADERO”, pues hay muchas religiones y profesiones de fe en el mundo que de cristiano sólo tiene el nombre, pero en realidad no es un cristianismo genuino. Es un cristianismo que satisface las consciencias de aquellos que espiritualmente duermen, y que tiene aspecto de validez, pero en realidad como una obra de arte falsa; no se para nada a aquello que hace veinte siglos se llamó cristianismo. Elevado es el número de personas que asisten a las iglesias el día de domingo, y que se identifican como cristianas; pero en la religión que profesan el elemento de “LUCHA” brilla por su ausencia. No saben nada de lo que es “LA CONTIENDA ESPIRITUAL” y “EL ESFUERZO DE UNA PROFESIÓN” de fe genuina. Tal “cristianismo” puede satisfacer al hombre carnal, pero no es el cristianismo de la Biblia. No es la religión que el Señor Jesús fundó y que sus apóstoles predicaron. No es la religión que produce verdadera santidad. El verdadero cristianismo es una lucha.

El verdadero cristiano ha sido llamado a ser un soldado, y con tal debe comportarse desde el día de su conversión hasta el día de su muerte.

¿Y contra quiénes ha de luchar el soldado cristiano? No contra otros cristianos. ¡Cuán miserable es aquella idea de lucha que tienen tantas personas al suponer que la verdadera religión consiste en una controversia perpetua! ¡Que poco saben de lo que es la pelea cristiana aquellos que, continuamente, se empeñan en sembrar contiendas entre los hermanos!

La lucha principal de cristiano es contra el mundo, la carne y el diablo. Hasta la muerte estos serán sus enemigos y contra estos deberá de pelear continuamente. A no se que obtenga la victoria sobre estos tres enemigos, todas las demás victorias serán vanas e inútiles.

Familia de la fe, luchemos la buena batalla de la fe. Que el Señor les bendiga.